No es solo un disco, ni una película, ni una performance: es todo a la vez. Una obra que arriesga el cuerpo y el alma para contar que amar siempre implica morir un poco.
Entrevista a un muerto mas:
¿Cómo se dio el proceso creativo para plasmar lo personal en imágenes?
Vivimos en tiempos de consumo rápido y descartable, por eso la integralidad de la obra fue una búsqueda clave. Al componer las canciones de este disco, las ideas llegaban acompañadas de imágenes, y como piezas de un rompecabezas fueron construyendo una historia de principio a fin. Decidí darle la misma importancia tanto a la música como a lo visual. Durante el proceso de escritura armé más de 100 poemas, y luego en el estudio seleccioné aquellos que terminaron conformando las 11 canciones del disco.
La película fue un paso decisivo: quería contar una historia, invitar a que el disco se escuche de principio a fin y crear un universo que también se sostenga en lo visual. Cuando surgió la posibilidad de proyectarla en cines, entendí que la búsqueda siempre había sido que no funcionara solo como un material complementario, sino que tuviera su propia entidad.
Para mí, el mayor triunfo es poder mostrar las profundidades de sentir, de arriesgar y de perder. Un show en vivo no siempre está al alcance de todos, ya sea por razones económicas o por la lejanía de quienes escuchan desde el exterior. La película abre una puerta: permite que cualquiera pueda entrar, de forma gratuita y en la plataforma más accesible y conocida por todos, YouTube.
¿Cuál fue tu objetivo principal de contar esta historia a través de un formato largo?
Siempre me fascinó el cine y las películas. Desde que comencé este proyecto, mi intención fue moverme entre distintas disciplinas, hacer que se crucen y hasta que se falten al respeto: convertir una poesía en canción, un álbum en película, un show en una obra de teatro, una frase en una imagen.
Gracias al boca en boca y al apoyo de la gente pude reunir al equipo y las herramientas necesarias para hacerlo realidad, a mi manera, buscando transmitir lo que siento. El objetivo fue que el formato largo tuviera matices, que no quedara del todo claro si se trata de una película, un video-álbum, un videoclip, una escena de teatro o incluso videoarte.
El equipo estuvo conformado por personas de cine, TV, redes, moda y teatro. Cada uno aportó la sabiduría de su área y juntos construimos un lenguaje común.
Al final, lo que busco es ser un artista completo. Esta obra no pretende adaptarse a algoritmos, modas ni estrategias del momento; va más profundo. No busca dar respuestas ni encasillarse, sino abrir múltiples formas de conexión. Alguien puede identificarse con un poema, una canción, un verso, una escena, un show, o incluso con una foto.
Entrevista al director, Matías Alegre:
¿Cómo describirías la experiencia de dirigir «De Amor”, la película?
La experiencia fue muy buena. Intensa en la mayoría de los momentos, con un gusto picante que a mí me impulsa a dar lo mejor y también muy introspectiva lo cual la hizo muy enriquecedora.
Cuando Guido (Un muerto mas) me trajo la historia me gustó desde el primer momento pero sabía también que íbamos a tener que negociar para poder ponerle mi impronta, lo cual no fue ningún problema porque venimos trabajando hace años y ya manejamos un código compartido en donde es fácil llegar a un punto en común y ponernos de acuerdo tanto en la construcción de acciones dramáticas como en la propuesta estética general del proyecto. No voy a decir que no hubo debates intelectuales porque estaría mintiendo, pero gracias a eso también podemos trabajar juntos hace tanto tiempo.
En mi cabeza siempre voy guardando imágenes que aplican a diferentes momentos de la vida, tengo pequeñas ilustraciones mentales que voy anotando. Al escuchar la historia muchas de esas ideas vinieron a mi mente y pude usarlas para contar la historia de un full álbum que se convirtió en una especie de película, en una especie de videoclip, en una especie de obra performatica.
En mi forma de contar las historias siempre opto por el camino mas conceptual y simbólico, trato de evitar lo linealmente narrativo y apunto desde las imágenes mas sensoriales a las mas concretas crear un mundo en donde se mezclen los tiempos y las líneas argumentales. Como la historia ya venía por ese lado, estuvo muy bueno poder adaptarla.
Armamos un guion base pero con muchas licencias, lejos del guion de hierro es interesante ver cómo se van dando la escenas en rodaje y poder tener la cintura para poder cambiar algo que la escena está pidiendo naturalmente. En ese sentido el equipo funcionó de maravilla, tanto en la dirección de fotografía a cargo de Fer Montiliengo y equipo, como en la dirección de arte a cargo de Agus Jauregui y equipo.
Trabajamos con la actriz Tatu Glikman que la rompió pero cabe destacar que todo el resto son no actores, tanto protagonistas como extras, y se generó un vínculo y una conexión muy linda que hizo que todo fluya de una manera orgánica y productiva para el proyecto. Todo el equipo logró conectarse en una idea.
Filmamos 11 videoclips en 6 días que terminaron en un mediometraje. Como mencioné anteriormente, intenso pero hermoso. Tuvimos que movernos rápido y estar preparados para imponderables, tanto desde aspectos técnicos como estéticos y narrativos. Para poder lograr este despliegue en el tiempo que teníamos, los roles de la asistencia de dirección de Pol Fernández y de producción de Juan Iabstrebner y el Chino Mindlis fueron fundamentales.
Desde el montaje se fue armando la historia final, fue un rompecabezas que podía encajar de varias maneras. Con Guido nos sentamos y fuimos descubriendo que había muchas aristas que fuimos probando hasta llegar al video final. Los inserts y los saltos de tiempo juegan un papel clave para poder lograr esa estética que buscábamos. Por momentos es un laberinto, por momentos es lineal, por momentos es dinámico y en otros descansa. Todo ese collage termina en una historia de amor y de desamor, todo al mismo tiempo, espiralado y en loop.
¿Cuál es tu principal fuente de inspiración a la hora de dirigir?
Mis fuentes de inspiración son muy variadas . Van desde el video arte, el cine clásico, el videoclip, el fashion film, la publicidad, hasta otras disciplinas como la pintura, la escritura y la instalación. En la mezcla y el collage intento encontrar un lenguaje propio.
En el caso de “Un muerto mas de amor” me base bastante en el cine clásico y lo mezcle con el lenguaje del videoclip y el fashion film. Sobre todo a la hora de contarlo a través del montaje. Cómo una simple historia de amor puede enroscarse y girar hasta llegar al mismo lugar pasando por muchos estadios propios de un vínculo. Siempre intentando interpelar a la mayor cantidad de gente posible con historias comunes de vida de una manera simbólica y cruda.
Créditos:
Idea Original: Un Muerto Más –
Dirección: Matías Alegre
Producción Ejecutiva: Mariano Mindlis
Guión: Matías Alegre – Un Muerto Más
Jefe De Producción: Juan Iastrebner
Asistente De Dirección: Pol Fernández
Dirección De Arte: Agustín Jáuregui
Dirección De Fotografía: Fernanda Montiliengo
Asistente De Producción: Marianela Sarmiento
Ayudante De Producción: Santiago Pels
Cámara: Fernanda Montiliengo Y Matías Alegre
Primer Ayudante De Cámara: Gerardo Azar
Segunda Ayudante De Cámara: Flope Velozo
Operador De Ronin: Juan Ignacio Garcia Sanchez
Gaffer: Agustín Intile
Reflectorista: Julia Roman, María Azul Catalan, Camila Carnota, Manuel Galíndez
Key Grip: Javier Arcaro
Grip: Ado Carattoli
Refuerzo Grip: Nicolás Macko
Ambientadora: Florencia González
Asistente De Arte: Martina Lara Somoano, Agustin Anton, Franco Hornos, Guadalupe Vázquez, Aantiago Joaquin
Utilero: Darío Gabriel Gomez
Asist De Utilero: Kevin Stocks
direccion de vestuario: Mila Matarazzo Harca
Ayudante De Vestuario: July Harca
Maquilladora: Celeste Dunan
Ayudante De Maquillaje: Soledad Horan
Montaje: Matías Alegre
Colorista: Dani Carrizo
Post Sonido: Joaquín Bañuelos / Polska
Asist. Montaje: Fernando Rodríguez
Foto Fija: Mikeila Borgia
Equipo Fx: Matías Reynoso, Matias Caboni, Juan Sebastián Azurmendi, Matias Adrian Reynoso, Juan Lucas Tirado
Sonido Directo: Eugenia Maneyro
Diseño Gráfico: Pope
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Asesina: Tatu Glikman